lunes, 7 de marzo de 2011

CUANDO DIOS INTERVIENE

Génesis 20 y 21.


Hay dos intervenciones muy directas (y muy necesarias) de Dios en estos capítulos.

Verdades A Medias.

La 1º intervención la encontrarás en el cap. 20:3-7 y 17. Si Abraham hubiera dicho TODA la verdad en cuanto a su relación con Sara, ¿hubiera sido necesaria la intervención de Dios frenando al “enamorado” Abimelec?

Viejos Problemas No Resueltos.

La 2º intervención de Dios está en el capítulo 21:8 al 20.

En el capítulo 16 el problema fue entre Sara y Agar (las chicas no se llevaban bien). Ahora el problema surge entre Isaac e Ismael (los chicos se parecían mucho a las mamás). Y si los viejos problemas no se resuelven originarán nuevos problemas. Aquel apresuramiento de Abraham y Sara les seguía trayendo dolores de cabeza a todos. En realidad el problema continúa hoy en día, porque todos los árabes descendientes de Ismael y los israelitas descendientes de Isaac, no se pueden ni ver. Los ataques militares o guerrilleros entre unos y otros son permanentes y todos los tratados de paz son inútiles ¡Se odian a muerte!

¿Y en esta situación por qué intervine Dios? Porque ni Sara, ni Abraham, fueron capaces de encontrarle una solución al problema que ellos mismos habían provocado. Y ni Agar, ni Ismael intentaron mantener una convivencia pacífica sujetándose a ellos. Entonces, en lo peor de la crisis, cuando Agar e Ismael vagabundeaban por el desierto, Dios interviene.

¿Qué piensas de estas dos intervenciones de Dios?

¿Te parece que Dios actúa como “un metido”, o como un Dios lleno de amor y misericordia? ¿Por qué?

¿Te acuerdas de alguna circunstancia de tu vida en la cual te hayas dado cuenta que Dios intervino para solucionar algún problema o para sacarte de alguna crisis?

En esos momentos, ¿cómo reaccionaste ante la intervención de Dios?

¿Crees que Dios (por misericordia y amor) está interviniendo ahora en tu vida? ¿Y en tu familia? ¿Eres capaz de darte cuenta de lo que Él está haciendo?

Piénsalo.

Ten en cuenta de que Dios no siempre interviene de la manera que tú piensas o quieres que Él intervenga; pero aunque no sea como tú lo imaginas o esperas Él siempre intervendrá de la mejor manera. Siempre brotará agua del desierto.

Ten en cuenta también que no siempre Dios va a intervenir. El NO intervendrá cuando te pongas terco. Tampoco cuando decidas pecar o desobedecer. En esos casos asumí tus propias consecuencias.

Pero Él SI interviene:

Cuando estés a punto de pecar por ignorancia (como Abimelec que no sabía que Sara era esposa de Abraham).

Cuando, en tus circunstancias, Él ve que hay limpieza y sinceridad de corazón.

Cuando ya no te queden más soluciones “humanas”, y tengas que confíar más en Él que en ti mismo.

Y Él, el Dios misericordioso que interviene en tus circunstancias por amor y que se compromete muy en serio contigo, espera que invoques Su Nombre.

No hay comentarios:

Publicar un comentario